jueves, 24 de noviembre de 2011

El Pozo

Perteneces al Pozo
y por mucho que luches por salir
le perteneces
tus movimientos domesticados
huelen a desecho
la oscuridad se ha incrustado en tus gestos
y tu imagen es sólo la ilusión de quien fuiste
Siempre perteneciste al Pozo
tu llegada a él no es más que la profecía
que en tu gestación acuñó el Orden.
El Orden que abandona a los inútiles
y los hacina en sus márgenes
El Orden que espera el momento propicio
para levantar sus armas contra estas vidas
que no merecen ser lloradas.
También pertenezco al Pozo
aunque aún mis pies no arañen su fondo
y todavía olfatee resquicios
de una vida posible.
También le pertenezco.
Desde mi posición suspendida atino a comprender
que lo único que da salida es
Amar.

domingo, 13 de noviembre de 2011

náufragos

Náufragos del mundo

pasan las horas

lejos de ello y aquello

silenciosamente Abrazados

o encarnizados en Placeres,

risas y sonrisas

suspiros y gemidos

lejos de ello y aquello

como náufragos del mundo

retamos a la muerte aislados

en goces insolentes

labrando nuestro tiempo

engendrando nuevos nombres

a nuestro querer desacostumbrado

Insospechadamente la libertad

asoma y sorprende

a estos náufragos del mundo

extrañados ante una calma

que no sucede a la tormenta.

sábado, 12 de noviembre de 2011

No me verás llorar.
Sólo aquel desconocido
que también toma café
en terraza soleada.
Tu no me verás
pero aquel que otea
recoge mis lágrimas
en la curva de una incógnita.
Él las recoge y las sopesa
e inventa una triste historia
que en nada asemeja a nosotros.

Si me querías lejos,
allí me tienes.
con esos pequeños desaires
hipócrita risa resonando
en el espacio
que esperaba con ilusiones
llenar
Lejos me tienes y cabreada.
Todo a distancia
sin demasiadas confianzas
Así lo quieres
como desconocidos
en una terraza soleada
llenando de irrealidad
la vida de otro.
no volveré a pisar el centro
no
no tiene remedio mi decisión
siempre tambaleante
olvidadiza
me falta la fuerza del rencor
la determinación al odio
fluctúan demasiado las medidas
repito
no volveré a pisar el centro
no.
me humillas alardeando
sinceridad
arrojando tu ceguera
falta de tino
devaluando
mi propio coraje
mi fuerza
aplastando fantasmas
escupes por doquier
sobrado
tras la fachada del
bienhacer
pulcritud
perfección

me huele la piel cuando exudo
rabia
me huele el coño cuando exudo
deseo
huelo y te perturbo
te atosiga mi hedor
malos hábitos
verrugas
cicatrices
durezas
no soy una princesa
frágil
sutil
atormentada
Trasmino vida y huyes.

Recuerdo un bar una noche,
sorbos amargos a mi copa de olvido.
Recuerdo flores marchitas
de rancia guarnición.
Una noche de reflejos parpadeantes
miradas desafiantes.
Recuerdo un tema sin nombre
gruñendo sus agudos
y una mezcla de satisfacción
delirante
retorciéndose en mi tripa.
Una noche como tantas
paseando soledad,
respondiendo en silencio al tedio.